Me llevo interesando por el mundo de los rosales desde el año 2014. Ese año compré un rosal barato de supermercado que venía envuelto en una redecilla de hilo y que no tenía más que 2 o 3 ramas. Como era de esperar, no duró mucho y se acabó muriendo a los pocos días de haberlo plantado, ya que no era más que un esqueje recién enraizado con solo unas pocas raíces y un sustrato malísimo.
En aquella época, un día se me ocurrió buscar rosales en internet y a partir de ahí descubrí un nuevo mundo porque yo solo pensaba que existían los rosales de té y algún que otro trepador. No me imaginaba para nada el gigantesco abanico de variedades y todos los tipos de rosales que existían.
Supongo que siempre que descubres algo nuevo, siempre tratas de informarte e indagar lo máximo posible sobre el tema. Comparas las opiniones de la gente, ves vídeos y fotos de los rosales de otras personas y al final, poco a poco vas tomando preferencias hacia unos tipos de rosal en vez de otros.
Los rosales que más me gustan son los rosales arbustivos, con preferencia de los rosales ingleses. Me gusta cómo combinan la estética y los aromas de las rosas antiguas con la modernidad de los rosales en cuanto a su resistencia a los hongos, a su capacidad para volver a florecer en otoño o a la incorporación de matices y nuevos colores a las flores. Antes solo existían rosales de color blanco y la gama de rojos y rosados, pero es que ahora hay de casi todos los colores: amarillos, naranjas, malvas, casi negros y hasta verdes. Solo falta el color azul. Hace 100 o 150 años era impensable conseguir toda esa diversidad de colores.
Ahora mismo tengo muy pocas variedades de rosales. La mayoría son duplicados que fui haciendo de los rosales que ya tengo porque cada año voy poniendo algunos restos de poda a enraizar para seguir multiplicándolos. Lo hago así porque me gusta tener al menos una copia de seguridad de algunas variedades, y en caso de que se me muera una planta, al menos conservo esa variedad en algún duplicado.
Algunos años funciona genial y consigo que prendan casi todas estaquillas, pero otros años, no sé por qué, solo me prenden 2 o 3. Tampoco es que le ponga especial interés, porque solo me limito a plantarlas en tierra y regarlas de vez en cuando. Si tuviera un terreno, no dudaría ni un segundo en ponerme a reproducirlos masivamente por acodo porque es un método más rápido y seguro que haciéndolo por esqueje, pero tampoco quiero juntarme con 100 plantas nuevas sin tener un sitio adecuado para poder tenerlas.
En todos estos años que llevo cultivando rosales, me fui encontrando con variedades que creo que destacan sobre el resto, ya sea por su color o perfume de la flor, por su resistencia a enfermedades o porque simplemente, me gusta el rosal en su conjunto. Son variedades bastante conocidas por los aficionados y que cuentan con numerosas opiniones en internet.
A continuación os dejo una lista de los rosales que más me gustan. Algunos de ellos ya los tengo, pero los añado aquí también para tener el listado completo recogido en un solo lugar. Algún día, cuando tenga un jardín, espero terminar mi pequeña colección.
- Boscobel
- Brother Cadfael
- Carolyn Knight
- Desdemona (flores poco llenas)
- Golden Celebration
- Heritage
- Jude the Obscure (comprado)
- Lady Emma Hamilton (comprado)
- Munstead Wood (comprado)
- St. Cecilia
- The Poet's Wife
- The Shepherdess
- Vanessa Bell
- Winchester Cathedral
- Wollerton Old Hall
Y aunque tener rosales en un jardín aporta gran valor estético, hacer un jardín exclusivo de rosales creo que puede quedar un poco pobre en algunos momentos del año y parecer un poco desangelado, sobre todo en invierno.
Me parece mucho más enriquecedor y estimulante a la vista tener los rosales combinados con otras plantas que aporten texturas, volúmenes y verdes diferentes. Todo esto habría que pensarlo bien para que las plantas puedan vivir juntas sin que predomine una sobre la otra, pero para no desviarme mucho del tema esto ya lo iré desarrollando en próximas entradas.
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