Acodos

Hoy voy a hablar de una técnica para multiplicar plantas leñosas y que ofrece mejores resultados que la reproducción por esquejes. Es una técnica sencilla que puede realizar todo el mundo y que no requiere una gran destreza.

Para empezar, tengo que decir que es un técnica reservada a plantas leñosas, da igual que sea un rosal, una hortensia o un árbol. Lo único importante es que sea una rama leñosa. En plantas herbáceas es mejor reproducirlas mediante esquejes en agua porque no se pueden diferenciar bien las estructuras de las ramas.

Los acodos se pueden realizar durante casi todo el año, aunque la mejor época es durante la primavera porque las plantas están en pleno crecimiento y circula una mayor cantidad de savia y por tanto, es más fácil descortezar la rama. Y ademas, cuando cortemos el acodo, aún le quedará el resto del año para seguir creciendo de forma independiente de la planta madre.

La técnica, como digo, es muy sencilla:

• Solo tenemos que hacer 2 anillos con un cuchillo dejando una separación de unos 2 o 3cm.
• A continuación hacemos un corte vertical y quitamos ese trozo de corteza tal como vemos en la imagen anterior. Tenemos que dejar al descubierto la capa blanquecina y eliminar todas las partes verdes. Si no estamos muy seguros de que nos salga bien a la primera siempre podemos utilizar una rama fea de alguna planta para intentar pelarla y ensayar los cortes.

• Añadimos sustrato y cerramos con una bolsa de plástico.
• Si con el paso del tiempo vemos que el sustrato se va secando en exceso, podemos ir pinchando agua con una jeringuilla. Pero evitaremos abrir la bolsa porque se nos puede desmoronar todo el tinglado.
• También podemos tapar esta bolsa con unas capas de papel de periódico y papel de aluminio para protegerla del sol y que no se recuezan las raíces con el calor.

Después de unas semanas ya tendremos suficientes raíces para cortar el acodo y dividir la planta. El tiempo que tarda en enraízar varía de unas especies a otras, pero en general tardan entre un mes o un mes y medio.

Esta técnica es válida para ramas y troncos de cualquier grosor. Es más rápida en ramas delgadas y jóvenes, pero también se puede aplicar en ramas del grosor de un brazo (aunque le va a llevar más tiempo enraízar lo suficiente).

La tasa de éxito es cercana al 100%, puede haber algún acodo que falle, pero casi todos salen bien.