Rosales antiguos: La historia de los Centifolia y los Musgosos

Voy a empezar una serie de entradas dedicadas a los rosales antiguos en las que iré explicando todas las clases que existen, de dónde surgieron, qué fue lo que impulsó a su desarrollo y también os enseñaré algunas variedades propias de cada clase para que las conozcáis un poco. Creo que el grupo más fácil para empezar es el de los rosales Centifolia, así que vamos con él.

En muchos sentidos, los rosales Centifolia son la quintaesencia de los rosales antiguos. Son unos rosales tan apreciados que todavía se siguen cultivando hoy en día y aún son muy apreciados hoy en día en Francia por su exquisito perfume.

Igual que con otros rosales antiguos, su origen es un poco confuso y no se puede dar nada por seguro. Los historiadores romanos Teofrasto (ca. 371 a. C. – ca. 287 a. C.) y Plinio el Viejo (siglo I) hicieron referencia a un rosal "centifolia" o "rosa de cien pétalos" en sus escritos. Claramente, no era un rosal Centifolia porque esos rosales se crearon muchos siglos después, pero esa referencia confundió a muchos historiadores posteriores.

El reverendo Joseph Hardwick Pemberton, que fue clave en el desarrollo de los híbridos musk, hace referencia a los rosales Centifolia en su libro 'Roses: Their History, Development, and Cultivation' de 1920, como una de las rosas más antiguas de Europa, agrupándolas con los rosales gallica y damascenos. Sin embargo, luego se confirmó que los Centifolia eran todavía más modernos.

El primer registro verificado de los Centifolia que conocemos hoy en día, es que fueron desarrollados en Holanda alrededor del año 1580 y durante el siglo posterior. Los holandeses crearon más de 200 variedades y se representan por todas esas rosas opulentas y globulares que fueron pintadas por los maestros holandeses y flamencos de los siglos XVII y XVIII.

Durante toda esa época, la flor cortada era un producto de lujo y solo la gente más adinerada podía tener flores frescas en sus casas y cultivarlas en los jardines. Y como las demás personas también querían flores en sus casas, hacia mitades del siglo XVII, se comenzaron a pintar bodegones de flores como una manera de satisfacer esa demanda. Al fin y al cabo, un cuadro con rosas era mucho más barato y duraba mucho más tiempo que tener un ramo de rosas. Estos bodegones de flores se mantuvieron en boga hasta el siglo XIX.

Detalle de 'Las tres Gracias' de Rubens, pintado entre 1636 y 1639. Cuadro completo aquí.

Detalle de 'Bodegón de flores y frutas' de Jan van Huysum (pintor holandés de 1682- 1749). Cuadro completo aquí.

En cuanto al origen de los rosales Centifolia podemos decir que son unos híbridos complejos de múltiples clases de rosas que se habrían extendido por Europa en aquella época. Según los estudios genéticos, poseen ancestros de híbridos Damascenos, Gallicas, rosa moschata, rosa canina y también de algunos rosales Alba. Resulta interesante que estos híbridos tan complejos se hubieran desarrollado en un tiempo en el que la ciencia aún no tenía descrito las bases del cruzamiento e hibridación de las plantas.

La anatomía de las flores no se entendió hasta principios del siglo XVIII y los primeros trabajos de genética vegetal no se iniciaron hasta casi el siglo XIX. Y, sin embargo, con más de un siglo de antelación a todo ese conocimiento científico, los criadores holandeses dieron desarrollado los primeros rosales Centifolias.

Estos rosales comparten algunas características con sus progenitores, como ser rosales de floración única en primavera, tener un rango de color que va del blanco al magenta, y tener un aroma intenso compuesto de muchos elementos. Pero donde se diferencian definitivamente es en su cantidad extremadamente alta de pétalos, superando los 120 pétalos y formando unas flores densas y pesadas que llegan a doblar las ramas.

Esta es una representación de Pierre Joseph Redouté de un rosal Centifolia probablemente de los jardines de Malmaison de la Emperatriz Josefina de Beauharnais, primera mujer de Napoleón.

El siguiente es 'Fantin Latour' en un rosa claro y que aún continúa cultivándose en muchos jardines.

La siguiente fotografía es de 'Bullata', también conocido como el rosal col, porque la disposición de sus pétalos recuerda a la cabeza de una col.

Otra ilustración de Redouté, esta vez de 'White Provence'.

Este es 'Petit de Holanda', que haciendo referencia a su nombre, es un rosal pequeño, de menos de un metro de altura.

Este es 'Parvifolia', también conocido como 'Rosa Borgoña'. Es uno de los Centifolia más pequeños, ya que no sobrepasa los 50cm de altura.

Y el último que os quiero enseñar es 'Robert le Diable' de un color oscuro y complejo y que a veces también lo podemos ver clasificado en el grupo de los Gallica porque también tiene muchas características en común con ellos.

La historia de los Centifolia es bastante interesante por sí sola, pero alrededor del año 1720 se encontró una mutación en estas rosas que tenía una especie de musgo creciendo en los capullos y en los tallos. Obviamente, no se trataba realmente de musgo, sino que era una proliferación de las glándulas odoríferas de la epidermis y que, al tocarla, era de textura suave y tenía una especie de resina pegajosa. Además, también tenía un olor que recordaba a una mezcla de manzanas y de acículas de los pinos.

Esta mutación se consiguió trasmitir a los rosales hijos y sirvió para crear a una nueva clase, los rosales Musgosos. Cuando los criadores finalmente pudieron cruzar el gen musgoso con otras rosas alrededor del año 1810, se convirtió en una moda en toda Europa. Este entusiasmo se mantuvo durante 40 años, pero entró en decadencia cuando se introdujeron los rosales híbridos perpetuos y los híbridos de té y dejó de verse como una característica llamativa.

Este es 'William Loob'. Es un rosal muy musgoso, con muchas espinas y también muy vigoroso.

El siguiente es 'Marie de Blois', de flores redondas en rosa claro y menos musgoso, pero con todo el carácter de los Centifolias.

El tercero es 'Chapeau de Napoleon', con una musgosidad en forma de crestas que lo hace diferente al resto de musgosos.

El siguiente es 'Nuits de Young' de un color oscuro similar al 'William Lobb', pero de tamaño más pequeño.

En rosa claro tenemos a 'Rose de Meaux'.

Y finalmente tenemos a 'Madame William Paul' como uno de los últimos Musgosos creados a finales del XIX y que además es refloreciente.

Como curiosidad, el gen musgoso pasó desapercibido durante muchos años, pero hace unas décadas parece que volvió a llamar la atención de algunos cultivadores modernos y en 1930, Pedro Dot lo incorporó a su programa de hibridación y creó una rosa llamada 'Golden Moss'. En 1950, Frank Skinner desarrolló 'Mossman' y Ralph Moore, en 1980, creó una colección de rosas miniaturas musgosas como 'Fairy Moss' o 'Scarlet Moss'. Aunque la aparición de estos pocos rosales no signifique la vuelta de los Musgosos, al menos podemos decir que su historia.

Y con esto terminamos la historia de los rosales Centifolia y Musgosos. Me despido con unas fotos de estos Musgosos más recientes.

'Golden Moss'

'Mossman'

'Fairy Moss'

'Scarlet Moss'