Híbridos fértiles

Leyendo por ahí y por allá me encontré la creencia de que las plantas híbridas creadas por el hombre no producen semillas fértiles. Y esto para nada es así.

Con el nombre de plantas híbridas me refiero a esas plantas que se obtuvieron por el ser humano para potenciarles una característica interesante. Por ejemplo, para conseguir plantas con mayor producción de fruta, con mayor vigor, con una floración más ornamental, más resistentes a las plagas, etc. Estas plantas se obtuvieron al seleccionar a sus padres, abuelos, bisabuelos, tatarabuelos, etc que tenían unas características especiales y esas características se fueron potenciando generación tras generación. A estas plantas híbridas con características especiales se les denomina "cultivares" porque son eso, cultivares creados por el hombre. Podemos quedarnos con que son plantas "mejoradas" para conseguir un objetivo en concreto.

Otras veces, cuando una población de plantas se encuentra aislada y se hibrida entre sí, pueden llegar a formarse "variedades" porque se despiertan o silencian genes que antes estaban estabilizados. Por ejemplo, en un grupo de margaritas y que, tras muchos años de polinizarse entre sí, aparece una planta de flores amarillas. En este caso se trataría de una "variedad" porque la planta apareció de manera espontánea de manera natural y no fue buscada a propósito por el hombre con ninguna finalidad. Luego puede que algún biólogo la descubra en medio de la Naturaleza y le vea interés comercial, pero esa planta seguiría siendo una variedad y no un cultivar.

Ejemplos de cultivares y de variedades hay un montón y se pueden crear en plantas de todo tipo: desde rosales, frutales, hortalizas, bulbosas, arbustos, geranios, vivaces, cactus, suculentas, carnívoras... y en cualquier otro tipo de planta que se nos ocurra.

Un "cultivar" se distingue de las otras plantas comerciales en que aparece un nombre entre apóstrofes después del género de la planta y se escribe con letra cursiva, por ejemplo Malus 'Everest' o Hippeastrum 'Minerva'.

El caso es que si estas plantas se dejan semillar, sí que producen semillas fértiles. Otra cosa es lo que salga de esas semillas porque se produce una recombinación de genes en la formación de los gametos y seguro que no saldrá otra planta igual. Démosle las gracias a la bendita y a la vez odiada recombinación genética de Gregor Mendel y su trabajo con los guisantes.

Veamos el ejemplo con mis rosales 'Lady Emma Hamilton' y 'Munstead Wood'. Son híbridos creados por el hombre, es decir, son cultivares y por eso llevan los apóstrofes y están escritos en cursiva. Si se polinizan a sí mismos, formarán semillas fértiles y si se polinizan mutuamente entre ellos, también darán semillas fértiles, pero ¿qué saldrá de esas semillas? Nadie lo sabe, porque los genes se habrán recombinado al azar y lo mismo puede salir una descendencia con características potenciadas como con características atenuadas.

La única excepción a estos híbridos fértiles serían aquellos géneros o cultivares de plantas que son autoestériles y necesitan sí o sí de otra planta con genes diferentes para producir semillas. Por ejemplo, el Prunus 'Golden Japan' (un cultivar de ciruelo) es autoestéril, pero si se poliniza con otra variedad de ciruelo diferente (con genes diferentes), produciría semillas fértiles sin ningún problema.

Este tema de los híbridos fértiles da para mucho de que hablar. En otra entrada profundizaré un poquito más, pero esta me sirve para exponer las diferencias entre lo que es un "cultivar", una "variedad" y que tanto un cultivar como una variedad pueden crear semillas viables.

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