Solucionar una clorosis férrica

La disponibilidad del hierro varía según el pH del sustrato. En pH<6 la disponibilidad del hierro es máxima y la planta puede utilizarlo, en cambio con pH>6 ocurre todo lo contrario y el hierro se queda bloqueado en el sustrato y no puede ser absorbido por las raíces. Cuanto más alto sea el pH, menos hierro habrá disponible y, por tanto, más fácil será que se produzca una clorosis férrica.

Existe una creencia de que para aportar hierro al sustrato se pueden enterrar tornillos cerca de la planta para que vayan liberando el hierro. Eso no es del todo cierto, ya que el óxido de hierro no es asimilable por las plantas en un pH básico. En un pH bajo es un poco más asimilable, pero tampoco es que sea una maravilla. Con esta práctica lo único que conseguiremos será contaminar el sustrato con hierro no
asimilable por las plantas.

¿Qué debemos usar entonces para aportar hierro? Lo primero sería aportar una materia orgánica al sustrato (ej. turba negra o compost) y si en un par de semanas sigue presente la clorosis férrica, entonces tendremos que utilizar los quelatos de hierro, que son una forma de hierro fácilmente asimilable por las plantas.

Existen varios tipos de quelatos de hierro a usar según el pH del sustrato. Vamos a verlos:

• Quelatos de hierro EDDHA: para usar con pH (3-10). Son los más versátiles para todo tipo de terreno, pero también son un poco más caros que otros quelatos. Son muy efectivos y, por lo tanto, se usan en menor cantidad que los otros tipos de quelatos.
• Quelatos de hierro HBED: para usar con pH<13. Extremadamente versátiles, pero dificilísimos de encontrar. Tampoco es algo que nos preocupe porque casi ninguna planta es capaz de vivir en pH tan altos y con los quelatos EDDHA nos arreglamos más que de sobra
• Quelatos de hierro DTPA: para usar con pH<7. Se pueden utilizar en sustratos o aguas ricas en calcio
• Quelatos de hierro EDTA: para usar con pH<6. Se inactivan en sustratos o aguas ricas en calcio
• Quelatos de hierro IDHA: casi iguales que los EDTA y no ofrecen ninguna ventaja frente a ellos.

A la hora de comprar los quelatos tendremos que fijarnos que aparezca la palabra Orto-Orto (o abreviado como o-o), ya que es un indicativo de su calidad. También tendrá que tener una riqueza de hierro de un 6% (aprox).

Está muy extendida la creencia de acidificar el sustrato y luego añadir los quelatos de hierro. Con esto lo único que se consigue es gastar tiempo, esfuerzo y dinero, ya que los quelatos EDDHA están diseñados para funcionar en un rango de pH muy amplio.

En la imagen de arriba vemos la disponibilidad de los diferentes tipos de quelatos. La disponibilidad del hierro EDTA cae en pH>7 y no será asimilable por las plantas. En cambio, el quelato EDDHA tiene un alto porcentaje de biodisponibiliad incluso en pH=10. El HBED va sobrado incluso en pH=12, pero no merece la pena porque muy pocas plantas viven en pHs tan altos.

Ahora que ya sabemos la teoría, vamos a lo que nos interesa y voy a listar algunas marcas que venden quelatos de hierro EDDHA de gran calidad, aunque seguramente existan muchas más:

• AGRARES Fe 4.8
• CHAUFER
• DORIAN Extra
• Fe Fol Ultra
• FERROPLUS
• FERROSTRENE K Olivo
• FERTIACTYL Green Extreme
• GREENTAL
• IRON FEA 6
• JISAQUEL Fe S6
• KELAMIX Elite
• KELKAT Hierro EDDHA
• LABIFER
• LUQSAFER Plus
• MAGRIQUELAT Fe
• MANVERT Bioestrene Enorto
• MAX Fe
• MICROVIT Excelsor
• NATURQUEL Fe 4.8
• NATURQUEL Fe 5.5
• NOVAFER 6
• NUMAFER 6SP
• NUMAFER Q 48
• NUTRIKEL Premier 6%Fe EDDHA
• NUTROBI FeORTOFER 185 Fe
• ORTOMEL
• PANTAFER
• PROMI Ferro WG 4.8
• QUIMUFER Plus
• QUIMUFER PS
• SEQUESTRENE
• SEQUONIA Ultra
• SPATRENE 6 Fe
• TORNEO Top
• UNICQUEL 5
• URANO Green
• UTREFER Quelafer 480
• VERTIRON 4.8
• VITAMOL Hierro 6% EDDHA 4.8
• WINNER Fe 6%
• WÜRTH Eisen 4.8
• YARAVITA Rexolin Q48

En mi caso, uso los quelatos Spatrene 6 Fe porque fueron los que encontré. Vienen en un formato granulado tipo arena y yo los aplico con un salero de cocina. Es decir, lleno un salero viejo con los quelatos y voy "salando" las macetas y así controlo bien la cantidad que le voy poniendo a cada planta y lo voy distribuyendo por la superficie de una manera uniforme. No hace falta poner mucha cantidad y más o menos voy echando la punta de una cuchara de postre en cada maceta de 40 litros. Si la maceta es más pequeña, hay que poner bastante menos, claro. El objetivo es echar un poco por la superficie y regar a continuación para que el quelato penetre en el sustrato y empiece a funcionar lo antes posible.

Un pequeño truco que uso para saber si la dosis de quelato es correcta es regar un poco de más y ver el agua que drena de la maceta. Si sale rojiza, aunque sea ligeramente coloreada, entonces perfecto. Nos llega bien esa dosis.