Cuando nos encontramos con un terreno que queremos ajardinar se nos plantean muchas dudas al principio: qué plantas pongo, dónde las pongo, cómo las organizo, qué mantenimiento les hago, etc. Nos asaltan dudas por todos lados y al final acabamos agobiados y saturados de dudas y el jardín nunca termina de hacerse realidad. O si se termina haciendo, puede acabar convirtiéndose en el jardín de los horrores por la falta de organización previa.
Una vez que tengamos el jardín, no es el mismo esfuerzo tener que mover un árbol porque no termina de funcionar, que tener que levantar la mitad del terreno porque se nos mueren las plantas por una mala organización.
Para evitar estos dolores de cabeza voy a hacer una guía con una serie de pautas que nos ayuden a hacer nuestro diseño de jardín de una forma ordenada y pasito a pasito:
1- PINTAR UN PLANO
Elaboramos un plano sencillo con un pequeño texto en el que se den respuesta a las siguientes cuestiones:
- Límites, medidas acotadas del espacio y de elementos tridimensionales como un muro o la altura de una ventana
- Orientación, paso del sol en invierno y verano y los vientos dominantes
- Topografía que cuente, al menos, con los desniveles más pronunciados
- Vegetación existente, especialmente árboles y arbustos grandes
- Agua disponible: si hay riachuelos, estanques, pozos
- Drenaje del suelo (cavar un hoyo y rellenar de agua para observarlo), tipo de tierra (arenosa, rica en materia orgánica, caliza, con muchas piedras), pH
- Muros, verjas, tomas de agua, tendidos eléctricos
- Edificios de la parcela: su estilo arquitectónico, materiales, ventanas que den al jardín
- Vistas desde la parcela hacia fuera
- Sensaciones: aromas o malos olores, ruidos, zonas especialmente agradables o que más nos gusten
2- PLANTEARSE PREGUNTAS:
- ¿Qué estilo de jardín nos gusta? Árabe, mediterráneo, japonés, xerojardín, contemporáneo, inglés, rústico o una mezcla de varios de ellos.
- ¿Qué necesidades y objetivos queremos satisfacer con la creación del jardín? Estas pueden ser de muchos tipos:
- Afición por la jardinería
- Espacio de juegos para los niños
- Lugar para cultivar
- Revalorización de la vivienda
- Mejora del entorno en el que vivir
- Lugar para estar con los amigos
- Espacio para practicar un deporte
- Crear vistas agradables
- Quizás tengamos varias necesidades, pero se trata de priorizar y organizarlas para después irles dando respuesta mediante el diseño.
- También es importante que consideremos ahora otros temas como:
- Posibles alergias al polen de algunas plantas
- Ganas y tiempo disponible para cuidar el jardín
- Presupuesto económico
3- ELABORAR UN ESQUEMA O DIAGRAMA INFORMAL
- Se trata de dibujar un plano en el que se reflejen cada una de las zonas que dan respuesta a nuestras necesidades, pero de forma esquemática y sin entrar en detalles. Se trata de hacer un diseño rápido, como si fuera el esbozo de un dibujo, que no nos lleve más de 5 o 10 minutos.
- También habrá que visualizar los accesos y las separaciones que conecten cada una de las secciones del jardín.
EJEMPLO PRÁCTICO
El plano de arriba se trata de un diseño sencillo de una finca ficticia de 600m², en el que queremos hacer una parte de huerto y otra parte de jardín en el que predominen los rosales, así que vamos a plasmar los pasos que vimos hace un momento.
Primero ubicamos la orientación de la finca, sus medidas, su entrada, las necesidades que queremos cubrir con el jardín (un huerto acompañado de una rosaleda) y las zonas de paso. De momento no entramos en medidas ni buscamos nada hecho con precisión. En esta fase estamos jugando y pensando una manera de organizar las diferentes zonas y ver cómo combinar los diferentes elementos.
Es importante saber la orientación que tiene la finca para conocer por dónde se proyectarán las sombras y cuáles serán las zonas más soleadas y las más húmedas. Además, hay que tener en cuenta que la proyección de las sombras varía según la época del año (incluso varía ligeramente cada día). En verano las sombras son más pequeñas y en invierno son más grandes debido a la angulación del eje terrestre respecto al sol. Así que tendremos que considerar que los árboles, pérgolas o los muros proyectarán una sombra diferente según sea verano o invierno.
En el ejemplo de arriba, la zona marrón será la zona de huerto y estará separada de la rosaleda por unos arbustos que ya pensaremos más adelante. A su vez, la rosaleda contará con 2 parterres rectangulares separados por un camino ancho entre ellos. Los límites exteriores de la finca estarán delimitados también por arbustos.
El diseño lo hice en 5 minutos, no está ni planteado a escala, pero en él ya podemos ver de una manera simbólica toda la organización del jardín. Insisto en que en esta fase solo se trata de crear un esbozo rápido y lo más simple posible.
En esta fase lo que nos interesa es crear varios diseños diferentes para luego elegir el que más nos guste así que no hay que entrar en muchos detalles. Si no tenemos mucha imaginación siempre podemos inspirarnos con algún diseño de Pinterest o de alguna otra web.
De momento es fácil, ¿no? Bueno, pues aquí nos vamos a quedar de momento. En la siguiente parte ya nos meteremos un poco más en faena.
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